Reseña: El ladrón del tiempo
Título
Original:
Thief of Time
Autor: Terry Pratchett
Saga: Mundodisco #26
Traducción: Javier Calvo
Editorial: DeBolsillo
Primera edición – Enero 2011 - Impreso
en España
Contratapa:
Tic
Las figuras grises conocidas como los
Auditores de la Realidad piensan que los humanos ya han desordenado bastante el
universo con su irracionalidad y su fantasía. Y han ideado un plan: detener el
tiempo para catalogar y organizar tranquilamente todo lo que existe.
Tac
El tiempo, sin embargo, tiene sus
propios paladines. Los Monjes de la Historia trabajan desde su monasterio para
que los humanos puedan seguir jugando con el tiempo, ganándolo, perdiéndolo o
regalándolo.
Tic
Mientras en Ankh-Morpork un relojero
empieza a construir el reloj que marcará con toda precisión el tic del universo
y detendrá el tiempo, en el lejano monasterio un joven extraordinario inicia su
aprendizaje junto al héroe de mil historias Lu-Tze el Barredor.
Tac
El tiempo avanza inexorable hacia su
fin, y los cinco (¡no, no eran cuatro!) jinetes del Apocalipsis recorren el
Mundodisco. Solo la Muerte sabe que tal vez el mismísimo Tiempo sea más humano
de lo que debiera, que puede haber tenido un hijo y que, si quiere impedir el
plan de los Auditores, necesitará la ayuda de la familia.
Ti...
«Aparte de las sonoras carcajadas que
provoca, Ladrón del tiempo sigue proporcionando ese placer en estado puro que
explica las legiones de adictos a las novelas de Pratchett.»
The Times
![](https://s-media-cache-ak0.pinimg.com/736x/47/7f/de/477fdebd9fe6f79385d95015b7c862ed.jpg)
Vuelvo a Mundodisco cada vez que lo
necesito.
Lo bueno que tiene esta serie es que sus historias son
autoconclusivas, aunque toda se desarrollen en un mismo disco, sobre cuatro
elefantes, sobre el lomo de la gran tortuga estelar, y leerlas en orden puede
ayudar en algunos casos, volver a recorrer este fascinante mundo me da placer,
me hace sentir bien.
En esta aventura están presentes
personajes que son extremadamente entrañables y queridos, Muerte y Susan, y
todo lector de Mundodisco sabe que, cuando ellos están en la mezcla, es genial
todo lo que estás por leer. Además, nos encontramos con el Apocalipsis (el fin
del tiempo) y la búsqueda de los famosos Jinetes que deben cumplir con su
obligación de cabalgar por el firmamento. Todo lo que se refiere a esa historia
es genial, Muerte debe ir a buscar a sus compañeros y cada encuentro es
maravilloso, cada uno de esos personajes, que representan lo peor de los miedos
y de las miserias del hombre, es como conocer a Muerte por primera vez, son “representaciones
antropomórficas” tan humanas que vale la pena conocerlos.
Susan sin duda es un personaje que se
merece sus propias historias, ahora es maestra en una institución y su forma de
educar a los niños hacen la delicia de cualquier educador, toda la interacción
con los niños, con la directora del colegio, con los padres… todo es genial,
mis partes favoritas, sin dudas, y de donde saqué más frases.
Con respecto a los auditores, son
seres que no me llegan tanto. A pesar de sus actitudes curiosas, frías y despojadas
de emoción, intentan entender el mundo, al mismo tiempo que quieren ordenarlo,
y para eso deben obtener un cuerpo humano y vivir restringidos al mismo, son
las limitaciones de ser mortal y de necesitar subsistir. Creo que, de ver más
de estos personajes, vamos a tener interesantes evoluciones.
Lu-Tze es un genio, simple y concreto.
Un monje que es, a la vez, insignificante y una leyenda. La interacción con su
aprendiz y su forma de ver el mundo fueron otras de las partes en las que me
pasaba marcando frases.
Por último, los dos protagonistas, el
aprendiz de monje del tiempo y el relojero, si bien fueron los personajes más
desdibujados, al final logran escribir su propia historia y queda un
interesante personaje que espero volver a ver en lo que queda de Mundodisco.
Como verán, amé a cada uno de los
personajes de este libro, cada vez agrego más personajes a mi lista de
favoritos, dentro de este mundo tan interesante y rico.
Lo disfruté muchísimo, y lo
necesitaba.
Nota final:
Frases:
“Las preguntas no tienen por qué tener
sentido, Vincent –respondió la señorita Susan-. Pero las respuestas sí.”
“A veces, pensar es como hablar con otra persona, pero esa persona
también eres tú.”
“Piensalo así –dijo por fin-. Piensa
en todo. Es una palabra cotidiana. Pero “todo” significa… todo. Es una palabra
mucho más grande que “universo”. Y todo contiene todas las cosas posibles que
pueden suceder en todos los momentos posibles en todos los mundos posibles. No
busques soluciones completas en ninguno de ellos. Tarde o temprano, todo causa
todo lo demás.”